Discoteca Flaming Star & El Arroyo Los Cagaos, DFS & El Arroyo Los Cagaos: Don´t Drink, Don´t Smoke – You must do Something (2008)

Discoteca Guitarrera Funkstorm , 12 de Junio de 2004, Viandar de la Vera, Cáceres. España

“Discoteca Guitarrera Funkstorm” fue un encuentro entre un grupo de performance que vive de y en la cultura urbana experimentando con la memoria pop con un grupo rural de la comarca española de La Vera que, sin melancolías investiga la memoria folclórica de su zona rescatando las piezas y el estilo espontáneo e irreverente que tiene la música tradicional.

Ambos trabajamos con conceptos de memoria, desplazándola, activándola, en esa experiencia comunitaria que es la canción. El Arroyo de los Cagaos enfrentándose al filtro que supuso una dictadura y Discoteca Flaming Star investigando el reemplazo de la música folclórica por la retórica pop. Los dos proyectos comparten una consciencia del disfrute, como herramienta de encuentro y de trabajo.

El 12 de junio de 2004, Discoteca Flaming Star y El Arroyo los Cagaos tocamos – juntos, seguidos, el uno para el otro y con participación del público– durante cinco horas en la plaza de Viandar de la Vera, pueblo de 300 habitantes en Cáceres, España. Queríamos poner a prueba y retar aquello que nos había juntado:
Los espíritus del punk. La importancia de los textos. La estructura musical de carácter sencillo y abierto que deja espacio a la espontaneidad y a la participación. AC/DC. El sentido abierto de la colaboración. La irreverencia. Ningún miedo ante el aburrimiento. La dependencia emocional respecto al entorno. No descartar nada a la hora de crear.

“ESE ARROYO QUE EXISTE Y NADIE SE ACUERDA DE ÉL”

GLOSARIO y PENSAMIENTOS AÑOS DESPUÉS DE LA ACTUACIÓN EN LA PLAZA DE VIANDAR DE LA VERA [Cristina Gómez Barrio (Discoteca Flaming Star) y Cthuchi Zamarra (El Arroyo los Cagaos)].

Más allá de la anécdota, hemos descubierto el uso de la sorpresa como forma de crear sentimientos. Los habitantes de Viandar de la Vera y los vecinos de los alrededores nos dieron la bienvenida a su plaza con curiosidad, con perplejidad pero también con complicidad.

COMPLICIDAD: muy presente en toda la música tradicional (que ahonda en las raíces de la identidad).

Hemos descubierto que nos gusta CANTAR JUNTOS, aunque estemos a 100 ó a 2.000 kilómetros de distancia. Que podemos actuar juntos sin ensayar mucho, lo que nos permite improvisar y también integrar intervenciones arrítmicas e incluso desafinadas.

Hemos descubierto que como artistas dependemos del vínculo emocional con el entorno inmediato.
Continuamos investigando la música tradicional liberada de su carga conservadora.
Continuamos investigando formas de expresión cultural liberadas de su homogeneización industrial.
Continuamos sin utilizar estructuras jerarquizadas.
Continuamos consensuando en el grupo todo lo que hacemos.
Continuamos activando un proceso comunicativo en múltiples direcciones.
Continuamos haciendo lo que hicieron otros antes que nosotros.

vieja música – nueva música

Nuestras HERRAMIENTAS: CANCIONES, guitarras, guitarrillos, bajos eléctricos desafinados, voces, bandurrias, violines, flautas, almirez, las letras de las canciones, la botella, el cántaro tocado a boinazos, el pasacalles, guitarras eléctricas, plumas, maquillaje, pelos largos, la repetición, textos, vasos de vino, el activismo antimilitarista, dibujos.

CANCIONES: forma de memoria oral, un vínculo con el pasado que recoge aspectos de la vida que no ha recogido la memoria escrita. Una respuesta personal ante los hechos históricos, políticos y sociales.
Hay CANCIONES que no entendemos del todo y canciones que la industria insiste en
que no nos pertenecen pero, que a pesar de ello, forman parte de nosotros. Nosotros
insistimos en hacer uso de ellas.

TANTAS SEXUALIDADES – TANTAS SÁTIRAS – TANTA LIBERTAD

Insistimos en la resistencia del texto.
Insistimos en la existencia de referencias que nos dan fuerza.
Insistimos en las ganas de disfrutar.
Insistimos en mirar a nuestro alrededor.
Insistimos en cantar, bailar, dibujar.
Insistimos en escuchar.
Insistimos en participar y en dejar participar al resto.